Reforma Política
Por Germán Zapata Vergara
Administrador público
Especialista en Gerencia de proyectos
@GERMANZAPATAV1
gzdistribuciones@gmail.com
La Comisión Primera del Senado aprobó, entre otros puntos; las listas cerradas a partir de 2019. Esto significa que, si la disposición se mantiene en los siete debates restantes, las listas a concejos municipales y asambleas departamentales del próximo año tendrán este sistema.
Esta medida puede ser una oportunidad para que los partidos en su interior, empiecen a construir verdaderas democracias e identidad de acuerdo a los principios rectores de cada uno de ellos. Los partidos Centro Democrático y Mira vienen haciendo escuela hace varios periodos electorales, lo que seguramente ya tienen ventaja sobre los demás, en especial sobre los partidos pequeños. Esa desventaja de los partidos pequeños puede convertirse en la oportunidad para consolidarse como serios y democráticos en sus instituciones, marcando la diferencia con los tradicionales, ganar la confianza del electorado y por consiguiente la construcción de militantes para hacerse fuertes como alternativa de poder.
Algunos críticos del proyecto, aseguran que las listas cerradas dan pie a la corrupción total, que no hay equilibrio y de alguna manera se afecta el derecho a elegir y a ser elegido, por Mi parte, también considero que es así, la desconfianza en los partidos, supone un fuerte negocio con la entrega de avales, cabezas de lista o primeros en las listas. Es responsabilidad del partido, de los candidatos, veedores y militantes; ser vigilantes para que estos casos de darse sean denunciados y así poder dar paso a la institucionalidad, ya que los partidos perdieron su identidad y hoy los hacen fuertes los nombres y los dineros.
Es muy importante tener claridad sobre la creación de mecanismos de democratización de los partidos políticos, para que las listas no se elaboren con el capricho de los directivos de los partidos políticos por afinidad, intereses, por dinero o nombres con dineros y no los principios institucionales.
Los derechos políticos progresivos, son otro de los puntos en discusión; quiere decir la posibilidad para que el CNE, reconozca la personería jurídica de acuerdo al porcentaje de votación obtenido. Si es al menos el 1% el reconocimiento será como grupo significativo de ciudadanos, si es el 2% el reconocimiento es de movimiento político, y con el 3% el reconocimiento de un partido político.
Se crearía una nueva autoridad electoral, sería el tribunal electoral conformado por listas enviadas por el consejo superior de la judicatura. Esta medida es acertada si realmente se busca despolitizarlo ya que no serían los partidos políticos quien los elige.
Sobre la financiación estatal tengo muchas dudas, de alguna manera ya se venía aplicando para evitar el caudal de dineros de toda índole en época electoral; convirtiendo este proceso democrático en plazas de mercado. Los topes era una forma de regularlo, algo que todos presentan muy bien pero que muy pocos cumplen. Está la reposición de votos y la financiación de la propaganda electorales ya asumidas por el estado, si se requiere evitar el ingreso de dineros mal habidos, es importante un verdadero seguimiento; que se cumpla lo que ya tenemos, para implementar las nuevas propuestas.
Seguramente a muchos le va a parecer acertado la limitación a 3 periodos de los congresistas. En la consulta anticorrupción millones de colombianos lo pedimos a gritos, es repudiable como muchos de nuestros elegidos a las diferentes corporaciones; por un lado son pésimos servidores públicos, como si fuera poco no salen de escándalo en escándalo por corrupción y otros delitos, o simplemente solo calientan silla; pero están atornillados a sus curules gracias al clientelismo y compra de votos porque en muchos casos ni se ven en las comunidades haciendo campaña, pero si les aparecen los votos precisos para llegar al cargo.
Como no hablar del voto electrónico, confío en que esta sea una opción que genere confianza al electorado, el ciudadano no cree en nuestro sistema electoral, sentimos que nos asaltan las curules representadas en quienes realmente escogemos, por otros que nos cambian en escrutinios. La registraría nacional el estado civil tiene un increíble desprestigio, la compra de votos mediante los llamados claveros, los paquetes electorales, el traslado de votos de un partido a otro para alterar umbral y cifras repartidoras, entre otras prácticas perversas son dudas que la fiscalía no ha terminado de dar respuesta a las demandas presentadas. Es el momento que se devuelva al ciudadano las ganas de salir a votar, que sienta que quien recibe la curul es el elegido popularmente y no el que deciden los escrutinios, de acuerdo a los intereses particularizados por esa presunta empresa criminal, que funciona al interior de la registraría en sociedad con grandes políticos y empresarios que hacen negocio con los dineros públicos.
Puedo concluir; que acabar con el voto preferente a partir del 2019, por listas cerradas, es un ejercicio, que, si no hay democracia al interior de los partidos, o sus directivos no son personas transparentes; veremos a los padrinos políticos comprando las cabezas de lista, muchas veces sin el suficiente trabajo electoral o con menor votación que quienes les siguen, lo que violaría el principio constitucional de elegir y ser elegido, el derecho a la igualdad o simplemente seria antidemocrático.
Se requiere partidos con personas serias en las directivas, transparentes, así se genera confianza, se construye militancia se piensa en el país; para ser verdaderos partidos con propuestas y con identidad, aprovechando algo positivo en las listas cerradas para el electorado y es que se facilita la forma de votar y menos ciudadanos se van a equivocar, los que serían menos votos nulos.